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lunes, 17 de octubre de 2011

COR JESV SACRATÍSSIMVM... MISERERE NOBIS


COR JESV SACRATÍSSIMVM. ¡MISERERE NOBIS!

ACTO DE CONSAGRACIÓN QUE HIZO DE SÍ
SANTA MARGARITA MARÍA DE ALACOQUE
AL DIVINO CORAZÓN DE JESÚS

 ***
Corazón sagrado de mi amado Jesús, yo, aunque vilísima criatura, os doy y consagro mi persona, mi vida, mis acciones, penas y padecimientos, para no servirme de ninguna parte de mi ser sino para amaros y glorificaros. Ésta es mi voluntad irrevocable, ser toda vuestra y hacerlo todo por vuestro amor, renunciando de todo mi corazón a cuanto pueda desagradaros. Os tomo, pues, ¡oh Corazón sagrado! Por el único objeto de mi amor, el protector de mi vida, el garante de mi salvación, el remedio de mi inconstancia, el reparador de todos los defectos de mi vida, y mi asilo seguro en la hora de mi muerte: sed, pues, ¡oh Corazón bondadoso!, mi justificación para con Dios Padre, y alejad de mí los rayos de su justa cólera. ¡Oh Corazón amoroso! Pongo toda mi confianza en Vos, pues aunque lo tema todo de mi debilidad, sin embargo, todo lo espero de vuestra misericordia. Consumid en mí todo lo que os desagrada o resiste, y que vuestro puro amor se imprima tan íntimamente en mi corazón, que jamás pueda olvidaros ni ser separada de Vos. Os suplico, por vuestra misma bondad, escribáis mi nombre en Vos mismo, pues quiero hacer consistir toda mi dicha en vivir y morir como vuestra esclava. Amén.

SANTA MARGARITA DE ALACOQUE. ¡RUEGA POR NOSOTROS!

AMOR Y FELICIDAD


Pablo Eugenio Charbonneau

Noviazgo
y
Felicidad




II
Tu novio




(Continuación. Ver lectura anterior aqui.)
Egoísmo masculino y autoritarismo femenino
Tal es la fisonomía del hombre llamado a compartir la vida de la mujer. Estos datos básicos dejan entrever cómo puede él fácilmente cobrar fama de egoísta ante su esposa. En efecto, por poco que ésta interprete los reflejos de su marido a través de su propia manera de hablar, de actuar, de sentir, de razonar, de imaginar, corre el riesgo de atribuir al hombre un mutismo estúpido, cierta brusquedad, insensibilidad, terquedad y, finalmente, vulgaridad. Es lo que revela, en definitiva, la acusación de egoísmo generalizado, dirigida contra los hombres. ¿Quién no se da cuenta de que ese juicio es injusto? Permítasenos recurrir a un ejemplo que ilustra la falta de lógica de semejante veredicto. Si una gacela y un elefante caminan juntos ¿se pretenderá, para que la marcha resulte más agradable, que el elefante se transforme en un corzo ligero y grácil? Y si no lo hace, ¿se le acusará de ser un egoísta rematado que exige de un modo desconsiderado a la gacela que se convierta en paquidermo? Que ambos sigan siendo lo que son, esforzándose recíprocamente en adaptarse el uno al otro. Lo mismo sucede entre el hombre y la mujer.

Ciertamente, muchos hombres son egoístas y transforman las inclinaciones de su sexo en defectos bien caracterizados. Pero ésta es la consecuencia de la propia debilidad que, por otra parte, jugará a la mujer la misma mala partida. Por tanto debe saber ser indulgente y comprensiva para ser, a su vez, juzgada con indulgencia y comprensión.

Cometería un error si intentara forzar el juego y coger las palancas de mando del hogar. No es ésta su función ni está dotada psicológicamente para ello. Si ocurre así, es una usurpación que sólo puede provocar conflictos; y es evidente que semejante trastrueque va contra la naturaleza profunda del hombre, al que su estructura psicológica predispone para esa función. Puede haber excepciones, pero éstas son raras, y nos parece razonable el siguiente consejo, confirmado por la experiencia: «Excepto ciertos casos muy raros en los que intereses primordiales y evidentes entren en juego, y en que la mujer o la esposa deba defender tenazmente sus derechos, ésta obrará sensatamente renunciando a discutir en el mismo tono, absteniéndose de querer dar prueba de fuerza o de imponerse al marido. En general, el hombre no acepta que su mujer le domine. Pero eso, semejante actitud provocará discusiones y violencias» [1].

Por otra parte, al estudiar el alma femenina, veremos cómo la entrega que la mujer hace de sí al hombre a quien ama, al que hace donación de todo su ser, constituye para ella la única manera de desarrollar su personalidad y alcanzar así el ápice de la feminidad. La siguiente observación de Alexis Carrel es válida tanto en este punto preciso como para el comportamiento general de la mujer: ésta debe desarrollar sus aptitudes en la dirección de su propia naturaleza, sin intentar imitar al varón [2] o suplantarle.

En caso de que haya ocasión parada mujer de asir el timón, que lo haga discretamente, «femeninamente», es decir sin que lo parezca. Ganará siempre más manejando delicadamente la barca que remando intempestivamente. Incluso ante un marido demasiado autoritario, la mujer debe saber «navegar» así. Con habilidad, salvará la armonía general y creará el clima del hogar. Se dice a menudo: «Una esposa diplomática y psicóloga tiene muchas probabilidades de triunfar, porque, en apariencia, cede ante su marido en todos los puntos, pero consiguen lo que desea, presentando la cosa como si viniera de él. Si en el momento elegido, sabe callar, o hablar, o sonreír, o tener un gesto sumiso o contrito, mimoso o frío, según los casos, muy pocos maridos serán capaces de resistirse, aun considerándose ellos los vencedores» [3].

Esto se aplica al conjunto de la vida conyugal, pero conviene insistir en un punto en que ese arte se convierte en necesidad, es decir, siempre que se trata del comportamiento religioso del marido.
Comportamiento religioso del hombre e influencia de la esposa
Ciertamente, es lógico y completamente normal que la esposa se preocupe de la vida espiritual de su marido. Pero en esto, como en todo lo demás, no debe ella juzgarle a través de su propia imagen.



SANTORAL 17 DE OCTUBRE






17 de octubre


SANTA MARGARITA MARÍA,
Virgen
Vosotros lloraréis y gemiréis, y el mundo
se regocijará; os contristaréis, pero vuestra
tristeza se convertirá en gozo.
(Juan, 16, 20).

   Santa Margarita María Alacoque, rehusando un ofrecimiento de matrimonio, entró a la edad de 24 años, en el convento de las Visitandinas de Paray- le-Monial, donde dio los más hermosos ejemplos de paciencia y humildad. Recibió, el 27 de diciembre de 1673, la primera de sus grandes visiones del Sagrado Coraz6n, que terminaron en 1675. Su vida, en adelante, estuvo consagrada al establecimiento de esta devoción y, en particular, al de la fiesta del Sagrado Corazón. Murió en 1690.

MEDITACIÓN
SOBRE LA PASIÓN DE JESUCRISTO
 

   I. Contempla a Jesús clavado en la cruz, mira cuánto sufre en todo su cuerpo. Su sagrada cabeza está coronada de espinas, su rostro magullado, sus manos y sus pies taladrados; todo su cuerpo, en fin, está cubierto de llagas y es presa de los dolores más crueles. ¡He ahí el estado en que se encuentra Jesús, mi Cabeza, mi Rey y mi modelo! Es menester que me asemeje a Él, en esto consiste mi perfección y mi dicha. ¡Ay! vivo en medio de placeres mientras Jesús es colmado de oprobios y sufrimientos. No conviene que los miembros sean afeminados cuando la cabeza está coronada de espinas. (San Bernardo).

   II. El Coraz6n de Jesús estaba sumergido en amargura y dolores tanto como su cuerpo. Él preveía que sus sufrimientos serían inútiles para la mayor parte de los hombres. Tenía piedad del enceguecimiento de los judíos. Estaba afligido más de lo que se puede imaginar, por la tristeza, los suspiros y las lágrimas de su Madre, al pie de la cruz con el discípulo amado. ¡Oh espectáculo doloroso! ¿Puedo yo contemplar a Jesús y a María en este estado sin derramar lágrimas, sin compadecer los dolores del Hijo y la aflicción de la Madre?

   III. Para librarme del infierno, Jesús soportó esta muerte tan ignominiosa y tan cruel. Estaba yo perdido sin remedio si no hubiera muerto Él por mí. ¡Nada había hecho para merecer este favor; y aun ahora ni siquiera pienso en él! No sólo no doy mi sangre por este Dios que murió por mí, sino que le rehúso una lágrima, un suspiro; ¡añado nuevos pecados a mis faltas antiguas! Reconoce cuán grave es la herida del pecado, puesto que fueron menester, para curarlo, las heridas de Jesucristo. (San Bernardo).

Meditación sobre la pasión
Orad por la conversión de los cismáticos.

ORACIÓN
   Señor Jesucristo, que habéis revelado de admirable modo a la bienaventurada Virgen Margarita las inagotables riquezas de vuestro Corazón, concedednos por sus méritos que como ella os amemos en todas las cosas y por sobre todo, y que siempre tengamos nuestra morada en vuestro corazón. Vos que vivís y reináis por los siglos de los siglos. Amén.

domingo, 16 de octubre de 2011

¡INDIGNANTE!


 VISTO EN :AGENCIA FARO -NOTICIAS DE ROMA


El 15 de octubre, los manifestantes asaltaron la Iglesia de San Marcelino y San Pedro, a pocos metros de la Basílica Mayor de San Juan de Letrán. Además de la imagen de la Santísima Virgen, también destruyeron un crucifijo, y causaron otros muchos destrozos. No hay detenidos.



NOTA DE BLOG: PEDIMOS A NUESTROS LECTORES QUE SE SUMEN A ORACIONES EN ACTOS DE REPACIÓN POR ESTOS ACTOS.


Destrozaron “indignados” iglesia y virgen en Roma



Los medios de comunicación destacan la imagen de la virgen destrozada y arrojada a la calle | Foto: AP

 

Notimex / Provincia Roma, Italia.-Un grupo de violentos destrozó una iglesia y arrojó a la calle un crucifijo y una estatua de la virgen, mientras que la basílica de San Juan de Letrán abría sus puertas a los manifestantes que huían de los altercados registrados ayer 15 de octubre en Roma durante la manifestación de los “indignados”.

Los medios de comunicación destacan la imagen de la virgen destrozada y arrojada a la calle como uno de los símbolos de la violencia de los incidentes producidos por varios centenares de encapuchados que se infiltraron ayer en la manifestación de los indignados.
Uno de los portavoces del vicariato de Roma, Walter Insero, se encontraba dentro de la parroquia de los santos Marcelino y Pedro y explicó hoy como “un grupo de encapuchados entró por la puerta de la sala utilizada para la catequesis, pegaron un cártel, y después comenzaron a destrozar todo lo que vieron. Cogieron la estatua de la Virgen de Lourdes y un crucifijo y los tiraron a la calle donde los destrozaron”.
“Un gesto blasfemo y de profanación que no tiene sentido”, añadió Insero, quien explicó que “afortunadamente no consiguieron entrar en la Iglesia, a pesar de que intentaron abrir la puerta”.
Mientras que los sacerdotes de San Juan de Letrán, la más importante de las basílicas de la capital, abrieron sus puertas para dar cobijo a decenas de manifestantes que huían aterrorizados de los altercados.
En su interior, algunas familias esperaron a que terminasen los incidentes para abandonar la zona, así como turistas que se encontraban allí en el momento de los incidentes y se vieron atrapados.
Después los sacerdotes les acompañaron a la parte trasera de la Iglesia para que salieran por allí, ya que era un zona más tranquila que no se había visto afectada por los incidentes.
Por su parte, el portavoz del Vaticano, el jesuita Federico Lombardi, expresó hoy su “condena por la violencia inmotivada y los actos de ofensa a la sensibilidad de los creyentes que se cometieron ayer”.

MÁS MODELOS DE FALDAS


Del blog de una amiga del Brasil: a grande guerra

Más modelos de faldas


(Bella falda florida, con  pequeña cintura, con  detalle de cierre
cremallera en la parte trasera . Que hacer con este detalle,
yo siempre lo encuentro grosero. Siempre encuentro zapatos elegantes
cerrados y con tacos medianos ...)

(Una falda bonita de  fiesta. Se puede ver que es de raso y
 quizás no luzca mucho porque se marca.
 Esta hecho de tela doble, más no descarto el uso de forro.
 Existen otras telas,
que son más gruesas y tienen destellos, como la seda)

(Atrás, um bonito detalle de lazo, bien femenino.)




(Me encantan esas faldas estampadas, es alegre.
Telas difíciles de encontrar, pero que si procuramos, quizás sí.
Esta falda tiene un corte casi en forma de V,
una cintura de 10 pulgadas y luego se va ampliando
Al final,  un detalle de hermoso color rosa.)

(Otra opción para una falda  de fiesta, esta un poco más discreta.
La diferencia de ella es el detalle de la cintura,
 que no luce el cinto de raso  La falda tiene un fruncido leve en la cintura
que no deja de ser algo ajustada al cuerpo, pero que le da 
una caida más bonita. Telas leves exigen forros
 por ser más transparentes.)




(Otro modelo de falda, bien diferente y femenina.
Esta  tiene tres pliegues cosidos que salen de la cintura, que se  abren
 a la altura de las rodillas.
Este color es muy bonito.)

(Rosa...Rosa... ¿existe color más femenino? Estampado delicado,
mezclando un poco de verde y beige .
Simple modesta y linda.)

EL PADRE PÍO NOS HABLA DE....


EL TEMOR


***

Lo que proviene de Dios comienza con un temor saludable y acaba tranquilizando nuestro espíritu.
                Ignorar si ante Dios sois dignas de amor o de odio es una pena, no un castigo, pues nadie teme ser indigno cuando realmente desea serlo y ya lo es. Por otra parte, tal incertidumbre nos viene de Dios para que no nos enorgullezcamos y seamos cautos de cara a la eternidad. A vosotras, especialmente, os las envía el Señor para que en el dolor encontréis la Cruz y los méritos consiguientes. Si confiaseis en vosotros mismas y siempre en la predilección divina, no continuaríais sufriendo. ¿Qué pena y qué mérito cabría ya en vuestras almas con tal persuasión?
                Incluso lo dolores más crueles se volverían rosas. A vosotras os debe reconfortar la autoridad del que os dirige: No os interese ver claro por vosotras mismas. No es necesario. Basta que vea claro el que os dirige y cuida de vuestras almas.
                Ateneos a lo que Él os dice. No hay más que creer doblegando nuestro espíritu. También los mártires creían sufriendo. El Credo más hermoso es el que florece en vuestros labios en los momentos más negros, más sacrificados, más dolorosos.
                El amor y el temor tienen que ir juntos. Son inseparables. El temor sin amor degenera en violencia. El amor sin temor, en presunción. El amor sin temor corre como caballo desbocado. No sabe a dónde se dirige.
                No debemos confundir nuestra indignidad potencial, lo que seríamos y en lo que podríamos caer sin asistirnos la gracia, con nuestra indignidad actual. Nuestra indignidad potencial nos hace criaturas amables a los ojos de Dios. La actual, desde el momento que es el reflejo de la iniquidad presente actualmente en el alma, en la conciencia, nos hace reprobables. En las tinieblas que frecuentemente os envuelven, las confundís y, conociendo lo que podríais ser, teméis lo que, en vuestro caso, no pasa de ser una mera posibilidad.

SAN PADRE PÍO. ¡RUEGA POR NOSOTROS!

SANTORAL 16 DE OCTUBRE






16 de octubre


SAN GALO,
Abad
Por cuanto eres tibio, y ni frío ni caliente,
estoy para vomitarte de mi boca.
(Apocalipsis, 3, 16).

   San Galo, discípulo de San Colombano, a quien acompañó de Irlanda a Francia, habiéndose retirado a una gruta, encontró en ella a un oso al cual ordenó le trajese leña y que se fuese después: el animal obedeció. Libró a la hija del duque Gunzo de un demonio que la atormentaba. Este duque le ofreció un obispado que el santo rehusó. Aceptó sin embargo otros presentes y los distribuyó entre los pobres. Fundó el célebre monasterio de San Galo, en Suiza, y murió en el año 641 ó 645.

MEDITACIÓN
SOBRE LA TIBIEZA ESPIRITUAL

   I. Llámase tibio a quien sirve a Dios con negligencia; no comete pecado mortal porque teme el infierno, pero no se esfuerza por evitar los pecados veniales. El alma tibia cumple su deber con negligencia, va repitiendo que se contenta con el último lugar del Paraíso; en una palabra, hace solamente aquello que no puede omitir sin pecar gravemente. ¿No es, acaso, el estado en que tú te encuentras? ¿Qué cuidado pones en ejecutar todas tus acciones para agradar a Dios? ¿Por ventura evitas hasta las faltas más pequeñas?

   II. Dios amenaza al tibio con vomitarlo de su boca. Las ofensas que recibe de los malos le son menos sensibles que las que recibe de un hombre que hace profesión de ser su amigo y su hijo. Este hombre puede hacer el bien y no lo hace. Escucha lo que dice San Ambrosio: Más le valiera al alma tibia no haber recibido la fe que des cuidarla.

   III. Tú, que estás en este estado, fuiste fervoroso o siempre permaneciste en esta funesta tibieza. Si has sido fervoroso, confesarás que es más agradable darse generosamente a Dios, que querer dividir el corazón entre Dios y el mundo. En efecto, en este estado de tibieza, no recibirás ningún consuelo del cielo, y el temor al infierno te impide gozar de los placeres de la tierra. Si siempre has sido tibio, ¡ah, por caridad! gusta el placer que se halla dándose por entero a Dios. El que te ha redimido todo entero exige que te des a Él por entero. (San Agustín).

El fervor
Orad por el aumento de la devoción.

ORACIÓN
   Haced, os lo suplicamos, Señor, que la intercesión del santo abad Galo nos haga agradables a vuestra Majestad, a fin de que obtengamos, por sus ruegos, las gracias que no podemos esperar de nuestros méritos. Por J. C. N. S. Amén.

sábado, 15 de octubre de 2011

SERMÓN PARA LA DOMÍNICA DÉCIMO OCTAVA POST PENTECOSTÉS


DECIMOCTAVO DOMINGO
DESPUÉS DE PENTECOSTÉS


Subió Jesús en una barquilla, atravesó el lago y llegó a la ciudad. Presentáronle aquí a un hombre paralítico postrado en una camilla. Y Jesús, viendo la fe de ellos, le dijo: Confía, hijo, tus pecados te son perdonados. Entonces algunos de los fariseos dijeron en su interior: Este hombre blasfema. Y como viese Jesús los pensamientos de ellos, les dijo:¿Por qué pensáis mal en vuestros corazones? ¿Qué cosa es más fácil decir, te son perdonados tus pecados, o levántate y anda? Pues para que sepáis que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar los pecados, dijo entonces al paralítico: levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa. Y se levantó y se fue a su casa. Las turbas al ver este prodigio, se llenaron de temor y dieron gracias a Dios, que dio tal poder a los hombres.
Después de sus correrías evangélicas por la Galilea, vuelve Jesús a Cafarnaúm. El milagro objeto del Evangelio de hoy es de los más clamorosos obrados por Jesús, diríamos que asiste a él todo un pueblo, tan denso como el de Cafarnaúm, y las clases dirigentes del mismo.
En él se revela Jesús tal como es: Dios omnipotente, perdonador de pecados, escrutador de corazones, dueño de la vida y de sus fuerzas.
La fama de los numerosos y grandes prodigios obrados por Jesús durante su misión por la Galilea había llegado a Cafarnaúm, ya conmovida por los anteriores episodios; el pueblo acude en masa a ver y oír al Maestro y a ser testigo de nuevas maravillas, de modo que no cabían ni aun delante de la puerta; repleta de multitudes la casa y zaguán, rebosan por la calle y sitios adyacentes.
Contrasta el afán de las multitudes con la tranquila actitud de Jesús, en el interior de la casa, sentado, como toca a un doctor, anunciando la palabra, predicando su Evangelio.
Junto a Jesús, escudriñando sus palabras y acciones, estaban las clases directoras del pueblo judío, que no habían podido substraerse de la conmoción popular; que comprendían que no se trataba de un magisterio meramente humano como el suyo…
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Mientras Jesús predicaba, un espectáculo emocionante se ofrece a los ojos de todos: cuatro hombres, llevando una litera, tendido en ella un infeliz paralítico, forcejean para abrirse paso entre la multitud y llevar al enfermo a la presencia de Jesús.
Y como no pudiesen ponérselo delante a causa de la multitud, su fe y confianza les sugiere un piadoso ardid: en vez de atravesar la puerta que da a la calle, tomarán la escalera lateral exterior de la casa y subirán el enfermo al tejado; practicarán una abertura en la cubierta y bajarán la camilla verticalmente hasta la misma presencia de Jesús.
Grande es la fe, así de los camilleros como del enfermo, cuando a tales procedimientos apelan para lograr la curación.
Jesús les alaba por ello; y se la va a premiar, dando al enfermo más de lo que quiere. Dirige primero al infeliz, a quien escribas y fariseos ni siquiera se dignan tocar, palabras suavísimas de amor y consuelo: Hijo, ten confianza Son dos palabras que abren a la esperanza el pecho del desgraciado.
Confía, hijo; ánimo, que vas a conseguir todavía más de lo que pides; pides la salud del cuerpo, y te vas a encontrar también con la del alma.
&&&
Con razón se puede preguntar por qué Cristo le perdona los pecados, cuando no es eso lo que se le pide, sino la salud corporal.
Responden San Jerónimo y otros Santos Padres que de este modo se indica la causa de la enfermedad, que hubo de eliminarse antes que la misma dolencia.
Muchas veces suelen las enfermedades ser efectos y castigos del pecado; y sin duda, el pobre paralítico así consideraba su dolencia. Jesús empieza, pues, por desatar su alma antes de dar libertad a sus miembros:Perdonados te son tus pecados.
San Beda el Venerable nos enseña que, principalmente son cinco las causas de las enfermedades que afligen a los hombres:
aumentar sus méritos, como aconteció con Job y los mártires;
conservar su humildad, de lo que es ejemplo San Pablo combatido por Satanás;
que conozcamos nuestros pecados y nos enmendemos, como sucedió a María, hermana de Moisés y a este paralítico;
la mayor gloria de Dios, como ocurrió con el ciego de nacimiento y con Lázaro;
un principio de condenación, como se demuestra en Herodes y en Antíoco.
Por este motivo, para curar a aquel hombre de la parálisis, el Señor empezó por desatar los lazos de sus pecados. De este modo le manifestó que a causa de ellos estaba sufriendo la inutilización de sus miembros, cuyo uso no podía recobrar sino desatando aquellos lazos.
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Los escribas y fariseos dicen que Cristo blasfema porque se arroga lo que es propio de Dios: perdonar pecados. Los otros Evangelistas, de hecho, aducen la causa de la blasfemia: ¿Quién puede perdonar los pecados sino sólo Dios?



Nada te turbe






Nada te turbe,
Nada te espante,
Todo se pasa,
Dios no se muda. 
La paciencia
Todo lo alcanza; 
Quien a Dios tiene 
Nada le falta: 
Sólo Dios basta.
Eleva el pensamiento,
Al cielo sube, 
Por nada te acongojes,
Nada te turbe.
A Jesucristo sigue
Con pecho grande,
Y, venga lo que venga,
Nada te espante.
¿Ves la gloria del mundo
Es gloria vana; 
Nada tiene de estable,
Todo se pasa.
Aspira a lo celeste,
Que siempre dura;
Fiel y rico en promesas,
Dios no se muda.
Ámala cual merece
Bondad inmensa; 
Pero no hay amor fino
Sin la paciencia.
Confianza y fe viva
Mantenga el alma,
Que quien cree y espera
Todo lo alcanza.
Del infierno acosado
Aunque se viere,
Burlará sus furores
Quien a Dios tiene.
Vénganle desamparos, 
Cruces, desgracias; 
Siendo Dios su tesoro, 
Nada le falta.
Id, pues, bienes del mundo; 
Id, dichas vanas; 
Aunque todo lo pierda,
Sólo Dios basta.





DICHOS DE SANTA TERESA DE JESÚS:  
"...Procuremos siempre mirar las virtudes y cosas buenas que viéremos en los otros y tapar sus defectos con nuestros grandes pecados... tener a todos por mejores que nosotros..."
"Para mí la oración es un impulso del corazón, una sencilla mirada al cielo, un grito de agradecimiento y de amor en las penas como en las alegrías."
"Tener gran confianza... Quiere su Majestad y es amigo de ánimas animosas, como vayan con humildad y ninguna confianza e sí."
"Guíe su Majestad por donde quisiere. Ya no somos nuestros, sino suyos."
"Tu deseo sea de ver a Dios; tu temor, si le has de perder; tu dolor, que no le gozas, y tu gozo, de lo que te puede llevar allá, y vivirás con gran paz."
"Dios no ha de forzar nuestra voluntad; toma lo que le damos; mas no se da a sí del todo hasta que nos damos del todo".
"Quizás no sabemos qué es amar, y no me espantaré mucho; porque no está en el mayor gusto, sino en la mayor determinación de desear en todo a Dios y procurar en cuanto pudiéremos, no ofenderle".
"Parezcámonos en algo a nuestro Rey, que no tuvo casa, sino en el portal de Belén adonde nació y la cruz adonde murió".
"Harta misericordia nos hace a todos los que quiere Su Majestad entendamos que es El, el que está en el Santísimo Sacramento. Mas que le vean descubiertamente y comunicar sus grandezas y dar de sus tesoros, no quiere sino a los que entiende que mucho desean, porque estos son sus verdaderos amigos".
"No hay que menester alas para ir a buscar a Dios, sino ponerse en soledad y mirarle dentro de sí".
"Quienes de veras aman a Dios, todo lo bueno aman, todo lo bueno favorecen, todo lo bueno lo dan, con los buenos se juntan siempre y los favorecen y defienden. "
"El amor de Dios no ha de ser fabricado en nuestra imaginación, sino probado por obras."
"No le parece que ha de haber cosa imposible a quien ama."
"Mire yo a mi Amado y mi Amado a mí; mire El por mis cosas y yo por las suyas. "
"Sólo amor es el que da valor a todas las cosas. "
"Siempre he visto en mi Dios harto mayores y más crecidas muestras de amor de lo que yo he sabido pedir ni desear. "
"¿Quien no temerá habiendo gastado parte de la vida en no amar a su Dios? "


"¡Oh Señor y verdadero Dios mío! Quien no os conoce, no os ama. "
"Considero yo muchas veces, Cristo mío, cuán sabrosos y cuán deleitosos se muestran vuestros ojos a quien os ama, y Vos, Bien mío, queréis mirar con amor. "
"Use siempre hacer muchos actos de amor, porque encienden y enternecen el alma. "
"La perfección verdadera es amor de Dios y del prójimo. "
"Quien no amare al prójimo no os ama, Señor mío. "
"El amor de Dios es el árbol de la vida en medio del paraíso terrenal. "
El amor de Dios se adquiere resolviéndonos a trabajar y a sufrir por Él. "
"La mejor manera de descubrir si tenemos el amor de Dios es ver si amamos a nuestro prójimo. "
"No sabemos amar... no está en el mayor gusto sino en la mayor determinación de desear contentar en todo a Dios..."

"Darse del todo al Todo, sin hacernos partes"

"Juntos andemos Señor, por donde fuisteis, tengo que ir; por donde pasastes, tengo que pasar"

"Todo el daño nos viene de no tener puestos los ojos en Vos, que si no mirásemos otra cosa que el camino, pronto llegaríamos..."

"Es imposible... tener ánimo para cosas grandes, quien no entiende que está favorecido de Dios"

EL PADRE PÍO NOS HABLA DE....


 LA FE, LA SIMPLICIDAD, LA JUSTICIA Y LA FIDELIDAD


***

El Credo más hermoso es el que florece en tus labios en los momentos más negros, más sacrificados, más dolorosos, en los que continúa animándote una infalible voluntad de superación. Es el Credo que, cual relámpago, disipa las tinieblas de tu alma, el que, en lo más recio de la tempestad, te eleva y conduce a Dios.
                Procurad aunar en vosotros la simplicidad de los niños y la prudencia de los adultos.

Sé fiel a Dios cumpliendo las promesas hechas. No te preocupes aunque te motejen los necios.

Procura que el triste espectáculo de la injusticia humana no turbe tu alma. La injusticia, globalmente considerada, también tiene su valor. Sobre ella verás surgir un día el triunfo infalible de la justicia divina.

Sé fiel a Dios cumpliendo las promesas hechas. No te preocupes aunque te motejen los necios.
                Los Santos, no lo olvides, han despreciado siempre el mundo y a los mundanos, y han pisoteado sus ridículas máximas.

SAN PADRE PÍO. ¡RUEGA POR NOSOTROS!